¿Buscas pasar un día en la naturaleza? ¿Una senda con vistas inigualables en un enclave mágico? La ruta del oso es exactamente lo que necesitas: una senda por la montaña asturiana perfecta para toda la familia, para hacer en bici o andando. ¡La elección de cómo disfrutar es tuya!
Esta ruta, que recibe su nombre de los osos pardos que se pueden encontrar en la montaña de Asturias, comenzó como una vía férrea empleada para transportar carbón desde los concejos de Proaza y Teverga hasta Trubia, que se cerró en 1964. No fue hasta 1995 cuando se inauguró el primer tramo de una nueva ruta ciclosenderista, y cuatro años después, el último tramo de esta ruta veía la luz.
En cuanto a los detalles técnicos sobre la ruta y sus características hay que destacar una serie de aspectos:
Esta ruta es un paseo perfecto para realizar solo, en pareja o con familia y amigos. Se puede planificar el día comenzando la ruta en cualquiera de los puntos que veremos más adelante.
Estos parajes son ideales para disfrutar sin prisa, así que siempre se puede parar a comer en mitad de la ruta en alguno de los puntos señalados.
Si nos decidimos por esta opción, comenzaremos en el área de descanso de Tuñón. Cuando llevemos los primeros 3,5 kilómetros del recorrido, nos encontraremos en Villanueva, donde nuestra ruta transcurre por la derecha del río. Alrededor de un kilómetro y medio más adelante se encuentra Buyera, donde hay un área de descanso y se encuentra el cercado de los osos con Paca y Molina, las dos osas pardas puras que viven en cautividad.
Tras 6 kilómetros recorridos se llega a Proaza y la senda pasa junto a una central hidroeléctrica que se encuentra entre el arbolado. En el kilómetro 15, llegaremos al desfiladero de Valdecerezales y avanzando cinco kilómetros y medio más, llegamos a Entragu, donde hay un área recreativa para hacer una parada y recargar energías. Dado que es la mitad de camino, puede ser un momento perfecto para hacer un descanso largo y comer algo.
Una vez retomemos la ruta llegaremos a la localidad de Samartín. Y al final de la ruta, recorridos 29 kilómetros, nos encontraremos Cueva Huerta.
Para la segunda opción de ruta seguiremos el mismo trayecto hasta la bifurcación donde, en este caso, tomamos el ramal de la izquierda, en el que la senda pasa a acompañar el cauce del río Quirós.
En el kilómetro 13 pasamos por Caranga Riba y llegamos al desfiladero de Cuevafurada. Unos 4 kilómetros más adelante pasamos por el pueblo de Vega, San Salvador y Bárzana. Podremos ver unos antiguos cargadores de carbón del siglo XIX en Santa Marina, a 23 kilómetros y medio de ruta, y 7 kilómetros después llegaremos a Ricabo, que marca el fin de ruta.
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Esta ruta es muy accesible para realizar en bicicleta. Y no solo eso, sino que además es un recorrido perfecto para toda la familia. Su baja dificultad y la escasez de desnivel hacen que se pueda efectuar esta senda sin problemas.
El tiempo estimado es de 3 horas, pero se puede alargar haciendo paradas más extensas. La ruta tiene una elevación máxima de 623 metros y una elevación mínima de 143.
En esta modalidad podrás hacer un descanso en Proaza, donde hay un área recreativa y espacio para comer. La señalización es excelente y no hay problemas de visión, por lo que en el desvío habrá que seguir por la parte derecha del río para llegar hasta Entrago, donde finaliza la ruta.
La otra opción de ruta, siguiendo la parte izquierda del río, nos llevará a ver el embalse de Valdemurio, donde habrá un área cercana para comer. A continuación, a unos 10 kilómetros llegaremos a Santa Marina, donde se termina el recorrido.
En este tramo el desnivel es ligeramente superior y la dificultad es media. Sin embargo, es una ruta asequible para quienes estén acostumbrados al senderismo con bici.
La Casa del Oso es un centro de información sobre este mamífero que vive en libertad en la Cordillera Cantábrica y que a día de hoy se encuentra protegido. Según Turismo de Asturias, este centro es un imprescindible si vas a recorrer esta magnífica ruta.
También es interesante saber que puedes cruzarte con Paca y Molina, los únicos ejemplares de oso pardo del cantábrico que permanecen en cautiverio. El cercado osero donde puedes observar a Paca y Molina cuando se acercan a comer, se encuentra en el lado izquierdo del camino si te diriges hacia el área recreativa de Buyera o la Iglesia de San Román de Villanueva.
La ruta del oso es perfecta para disfrutar con la familia, con niños pequeños o en pareja y con amigos. Para cualquiera de estas alternativas, la ruta ofrece un contacto directo con la naturaleza, vistas impresionantes y una oportunidad fabulosa para disfrutar del aire libre y la naturaleza.
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